Siempre he estado rodeada de naturaleza. Sé lo que es despertar a las 5:30am y caminar descalza en el césped mojado por el rocío, jugar entre los pastizales, correr y brincar por todo lado haciendo bulla sin tener que preocuparse por despertar a los vecinos o que me manden a callar. Se lo que es trepar a los árboles y tener astillas en las manos, volverme una experta catadora de frutas de mi patio. Comer jocotes con sal, tener cuidado que el jugo del marañon no caiga en la camisa porque mancha, tener aliento de nance por 3 días seguidos y bajar mangos a pedradas y comérselos a mordiscos sintiendo los jugos que se deslizan por mis brazos hasta gotear por mis codos.
Mi niñez fue lo mejor y cuando crecí mi amor por el mango no paró y encontré nuevas y mejores maneras, les comparto una receta de cheesecake de mango súper rico y fácil de hacer.
Ingredientes:
1 y 1/2 tazas de galletas Graham molida
1/3 taza de mantequilla derretida
1/2 taza de leche condensada
1/2 taza de dulce de leche
1 paquete (225 gr.) de queso crema, a temperatura ambiente
2 sobres (7 gr. cada una) de gelatina sin sabor
1/4 taza más 2 cucharadas de agua hirviendo
1 y 1/2 tazas de puré de mango
Preparación:
- Engrasar un molde de unos 22cm.
- Combinar las galletas Graham y la mantequilla derretida en un bol pequeño. Colocar la mezcla en el fondo del molde preparado y presionar. Refrigerar por 15 minutos.
- Batir la leche condensada, el dulce de leche y el queso crema en un bol grande hasta que esté suave. Reservar.
- Mezclar 1 sobre de gelatina y ¼ taza de agua hirviendo hasta que la gelatina se haya disuelto por completo (aproximadamente 3-4 minutos).
- Inmediatamente añadir la gelatina a la mezcla de queso crema y batir con una batidora hasta que esté bien combinado.
- Verter en el molde sobre la base de galletas y suavizar la superficie. Refrigerar por 1 hora o hasta que haya cuajado.
- Mezclar el sobre de gelatina restante con las 2 cucharadas de agua hirviendo restantes, hasta que la gelatina se haya disuelto por completo (aproximadamente 3-4 minutos).
- Añadir inmediatamente al puré de mango y batir con la batidora hasta que se haya combinado del todo. Verter sobre el cheesecake y suavizar la superficie.
- Refrigerar por 1 hora o hasta que haya cuajado. Decorar con rodajas de mango encima del cheesecake.
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